En Educación Infantil aprendemos a través de rutinas de aprendizaje y trabajo cooperativo, respetando siempre el ritmo evolutivo de nuestro alumnado.
Partiendo de sus necesidades e intereses, ampliamos nuestros espacios de aprendizaje más allá de la propia aula, creando un espacio donde pudieran ser libres, crear sin límites y dejarse llevar.